Un parentesis en el paraiso

Viernes 29 de octubre, se acaba la jornada laboral, ¡ que bien! rapidamente salgo de trabajar cojo mi coche y me voy a  casa de mi amigo Alejandro. El motivo no es otro que nuestra partida hacia una casa rural en la que pasaremos estos dias, hasta el lunes.

Comemos, charlamos y partimos, el camino es corto puesto que la casa esta cerca de Ponferrada, a 20 minutos, por lo tanto el viaje pasa rapido, en una hora y cuarto llegamos a nuestro destino, Casa Rural La Mallada, es preciosa, y el paraje en que se situa mas aun, eso si el tiempo es algo humedo, vamos que no paro de llover ni un momento.

A lo largo de ese dia y del sabado por la mañana llegaron todos los que faltaban para completar ese maravilloso grupo de amigos, que me hacen recordar la suerte que tengo.

Fue un fin de semana sencillamente maravilloso, pues al lugar que era idilico hay que añadir la compañia que era aun mejor.

Estaba Santo, el chef un genio en la cocina, y un autentico mago con los niños.

Vaquera, no cocina, no recoge demasiado, pero da igual es un genio que nos hace reir, y con el me encanta meterme.

Ruben, el aleman, hace su planing cada nochevieja y no se mueve un apice de sus planes, recien enganchado al atletismo, al cual le fiaria mi dinero sin dudarlo, otro genio.

Bob, es la bondad hecha hombre, que aguante tiene mira que a veces le pico demasiado pues sorprendentemente nunca me ha pegado y podria, es el encargado de las fotos mas que un genio, un artista.

Emilio, con decir que vino desde Granada esta todo dicho, es como si fuera un hermano mayor desde que era un enano, le recuerdo y siempre con cariño.

Tambien vinieron sus esposas, novias, da igual el nombre que les pongas, sus chicas:

Vero, un poquito mandona, es como mi segunda mama, pero genial simpatica divertida, y colaboradora como la que mas, es la unica que es capaz de hacer que Vaquera y yo nos movamos para colaborar.

Belen, un cielo, algo mocosa y picotera pero u cielo al fin y al cabo, sus locuras me hacen reir muchisimo, es una niña llena de corazon.

Evita, otra que se pego un palizon de viaje, que decir de ella pues una cosa que es muy importante, nunca jamas esta de mal humor y eso no es facil.

Bea, la Santanderina del grupo, la conozco menos que a las demas pero es una tia genial, me encanta que siempre diga lo que piensa y que tenga a su chico tan feliz.

Ahhhhhhhh que no se me olvide, vinieron sus nenes Adri, Andres y Paula, que facil fue pasarselo bien con ellos.

Todos juntos consiguieron una atmosfera magica, todos por ser geniales me hicieron sentir bien que digo bien mucho mejor que eso, me hicieron sentir en el paraiso, por eso a todos les quiero un monton.

En todo este maravilloso finde semana, hubo un parentesis, el domingo por la mañana, Ruben, Vaque, y yo nos fuimos a correr la carrera de relevos Astorga- Ponferrada.

Emilio vino como coche apoyo, para poder correr los tres, primero fuimos a Astorga, recogimos los dorsales, tomamos el cafe correspondiente y camino a la salida de Vaque y mia que era la salida del segundo relevo Rabanal del Camino.

Llegamos y lo primero que sentimos al bajar del coche fue un frio intensisimo, aun asi no nos abrigamos demasiado, Vaque y yo callentamos ya a esperar, Emi y Ruben hacian tiempo hasta nuestra para desplazarse hasta el tercer relevo que corria el aleman.

Mientras calentabamos la adrenalina subia, a mi me daba que esta carrera iba a ser distinta a todas, y asi fue.

Terminamos nuestro calentamiento y nos pusimos en la linea de salida a esperar al ganador de la primera etapa, tras aplaudirle como se merece, nos colocamos, nos dijeron aquello de a sus puestos y... a correr, en ese momento no llovia, y no se notaba demasiado el viento, pero todo cambiaria rapidamente, sobre el Km 2 la lluvia empezo a caer de manera insistente, y que decir del viento, arreciaba, ademas entraba de cara por la parte derecha de la carretera, lo que me hizo pensar que estabamos ante una batalla epica.

El primer tramo lo denomiria el del grupo, cada uno buscaba su grupo con el que ir para que fuera mas facil llegar arriba, duro poco, puesto que la pendiente, el viento, la lluvia y el frio hicieron que las distancias en carrera se marcaran pronto, yo en esta fase iba con un chico que se llamaba Diego, en ese instante me adelantaron Emi y Ruben dandamo unos animos que siempre se agradecen.

Mis sensaciones eran extrañas, puesto que mi cuerpo tenia fuerza, pero no podia desarrollarla porque estaba literalmente congelado, mis piernas no se movian mas rapido aunque yo quisiera, y mis manos ni te cuento, estaba cerradas, y no tenia ninguna capacidad de mover los dedos, tanto es asi que no puede coger ni un solo avituallamiento.

Lo unico que podia hacer era subir y subir y subir, y despues seguir subiendo Km tras Km, Diego ya me habia dejado pues mi heladas piernas me dijeron que no podia ir con el, y las hice caso, asi que ya me quede solo, no tenia ni idea de cuantos kilometros iban, asi que segui subiendo y subiendo y subiendo.

Llegamos a Foncebadon, no se porque me habia hecho a la idea de que la subida terminaba alli, pues no, para nada, curva a derecha, curva a izquierda, y lamento de lo mas profundo al ver una interminable rampa cada vez con mas pendiente, bueno no pasa nada a seguir subiendo.

Otro punto en el que mi cabeza dio vueltas, fue la llegada a la cruz de ferro, alli dije para mis adentros ya esta, estamos arriba, pues para nada, esos 5 Km de falso llano no eran tales, es verdad que habia algun tramo de bajada, pero tembien los es que la mayor parte eran subidas y con rampas realmente fuertes, en ese momento el temporal era tremendo yo ya no se si llovia o caia nieve el caso es que estaba empapado, practicamente iba solo, el frio era horrible, y que podia hacer yo, pues no quedaba mas que subir y subir, y eso fue lo que hice.

Tras tanto subir, llego un momento en el como es logico, se acabo la subida, la verdad es que no me doy cuenta de que momento fue ese, creo que estaba ya anestesiado, mi cuerpo corria, pero mi mente no se donde andaba, el caso es que ese momento llego, y sin darme cuenta empece a bajar y hay si que di todo lo que tenia, mejor dicho todo lo que me quedaba, me tire cuesta abajo y baje,baje y baje, hasta el acebo, creo que hice 1 hora 37 o 38 no se exactamente, pero que mas da, lo que si hice y alguno dira que estoy loco fue disfrutar corriendo como nunca antes lo habia hecho, ahora se que sino pasa nada raro en 4 semanas Vaque y yo seremos maratonianos.

Por eso y porque me esperaba el paraiso llegue a mete sonriente y feliz, a partir de ese momento volvi a mi paraiso, que no fue la casa rural, fueron mis amigos.